El agua de Berja es famosa por su baja mineralización y por una calidad unica en la provincia.
Se trata de un legado de siglos que constituye hoy la preciada herencia que preside la historia de Berja.
Existen un total de 13 fuentes en la localidad:
Fuente de Toro
Remonta su edad al siglo XVIII y posee rasgos neoclásicos: sus dos pillares, uno para las personas –mas alto-, y otro para las bestias –más bajo-: en su caño, el obligado frontón curvo; y su base, tres pedestales rectangulares sobre los que se asientan la fuente.
El origen de su nombre proviene del apellido de una familia que allí vivía, cosa normal por otra parte.
Se encuentra rodeada por el Barrio del Matadero, el Barrio de Pago, el Barrio de los Cobos y naturalmente, de una barriada surgida entre estos barrios llamada BARRIO DE LA FUENTE DE TORO.
La fuente, es también un foro de comunicación social. Allí se dan cita las mujeres para comunicarse mientras el chorro lleno los cantaros.
Fuente de los 16 caños
La Obra de la fuente data de 1859, de la cual no puede dudarse de su importancia, como lo demuestra: el grueso acopio de materiales, la utilización un total de 70 piedras y las 86 peonadas, todo un coste de 5.804,63 reales.
Fuente Don Emilio
Se encuentra situada en la calle Alcántara, en la confluencia con la calle Carolinas. Es una fuente típica neoclásica del casco urbano de la primera mitad del siglo XIX. Su nombre deriva de una transposición fonética del nombre de un vecino de Berja, Emilio Gutiérrez, conocido popularmente como “Don Emilio”, a cuya casa está adosada la fuente.
El esquema de construcción de la fuente consta de un pilar de piedra sencillo; un cuerpo, que construye una pirámide con un rectángulo y un trapecio, con un caño en el centro; y por último, un frontón triangular que remata la obra, todo ello en piedra fallada que resalta los perfiles. Su entorno forma un conjunto arquitectónico muy singular, acompañando a esta fuente una casa que fue Centro de Enseñanza, su huerto llamado “San Gabriel y Santa Ana”, un molino y la magnifica casa de los Gutiérrez-Manzano.
Fuente del Marques
Enclavada en la calle del Marqués de Iniza, de donde recoge su nombre, muy cerca muy cerca de Los Rosalillos, esta fuente data de la primera mitad del siglo XIX. En el plano de Coello se la incluye con el nombre de << Fuente del Oratorio >> (año 1.855).
Su obra de cantería se compone de tres partes bien diferenciadas: un grueso pilar decorado con rectángulos; un cuerpo de forma trapezoidal, con curvaturas a diferentes profundidades, con su caño decorado; y un frontón curvo rematando la fuente, que alberga una venera tallada, dándole una elegancia que la distingue del resto de las de su misma tipología.
Su nombre está relacionado con la familia Rodríguez-Chacón, Marqueses de Iniza, militares que tenían su palacio residencia en esta misma calle.
Fuente Placeta de la Saliva
Al final de la Calle del Marqués de Iniza, en la Placeta de la Saliva, está ubicada esta fuente que recibe el nombre de la antigua Placeta de la Caliba, situada en la confluencia de las cuatro calles.
Aunque se trata de una fuente muy antigua, su traza actual es al menos de la primera mitad del siglo XIX, siendo citada por Madoz entre las << 6 fuentes públicas de abundantes y buenas aguas >> que en su época tenía Berja.
Al igual que las anteriores, esta fuente consta de tres partes: un pilar de piedra rectangular, con evidentes muestras de erosión en sus bordes producidas al apoyar los cántaros para coger el agua; un cuerpo de estructura trapezoidal con curvaturas, en cuyo centro tiene un grueso caño metálico decorado; y un frontón semicurvo con relieves muy acusados.
También es digno de mencionar el conjunto urbano que gira en torno a la fuente, ya que , como se dijo, está situada en la confluencia de cuatro calles: la calle de Las Mercedes y la calle Seca, con el antiguo Matadero Municipal hoy centro de actividades múltiples, salida obligadas del populoso barrio de Los Cerrillos; y las calles de los Arévalos y del Marqués de Iniza.
Funte de la Higuera
Al igual que la fuente de la Almez, se ubica en el mismo barrio, en el llamado <<Camino de la Fuente de la Higuera>>, a los pies de las Chiscarras, bajo el puentecillo. Ya el libro de Apeos de Berja (1.572-1.575) la cita y, asimismo, Pascual Madoz (Siglo XIX). El aspecto actual de esta Fuente se configuro en el año 1.934.
Reproduce un modelo constructivo árabe denominado <<qanab>>, popularmente conocido como la <<galería>>, en el pilar y el caño se sustituyen por una acequia usada como lavadero, dando origen a otro Brazal de riego. Para evitar su deterioro en fechas recientes se colocó una reja de forja.
Como la Fuente del Almez, su nombre también está relacionado con el nombre de un árbol, que en otro tiempo pudieron estar sembrados en el entorno de las mismas.
Fuente del Almez
Esta situada en el típico y popular barrio de los Cerrillo, en la calle de Santa Susana, a mitad de camino de la Erminta de la Virgen de Gádor.
Su origen es milenario, y ya aparece citada por Pascual Madoz ( 1.850-1.850 ), como <<Fuente de la Almés>>, y popularmente se conoce también como <<Fuente del Almez>>. Algunos años más tarde el antiguo barranco de su nacimiento fue transformado en la obra de piedra que hoy conocemos, a finales del reinado de Isabel II ( 1.866 ).
Cuenta con un pilar de piedra muy sencillo y un cuerpo, en el que se sitúan dos caños rematados por un curioso frontón. Tiene hermosos trancos de piedra para solaz del visitante y aún conserva parte de su empedrado y las piedras que las mujeres utilizaban de lavadero.
Es curioso observar que frente al pilar brota un segundo caudal de agua que se une a la acequia de la Fuente formando el Brazal de riego Almez.
Fuente del Oro
Sin lugar a dudas, es la más emblemática de Berja, Está situada en el Barrio de Los Cerrillos, enclavada en el Barrio Nuevo, en el camino de la Ermita de Gádor y muy cerca del Peñón de Santa Lucía.
Su nombre aparece ya recogido en el libro de Apeos de Berja (siglos XVI), causando admiración en los viajeros por su gran caudal de agua. Pascual Madoz también la incluye dentro de los manantiales más notables de la villa.
Fue remodelada en tiempos de la II República (1.934), no habiendo sufrido modificación alguna hasta el día de la fecha. Dispone de un pilar de piedra muy sencillo, rematado por un frontón curvo, con apertura central que deja libre el agua que contiene. Su cuerpo alberga dos gruesos caños que flaquean una gran cascada de agua, que salta al pilar, asombrando por su extraordinario volumen. Tiene, asimismo, una acequia que da nombre a su Brazal, la cual se utiliza, a su vez, como lavadero público, creando uno de los rincones más típicos de Berja.
Fuente de Riguarte
Conocida desde los tiempos de los moriscos con el nombre de <<Perpentín>>, y popularmente como <fuente de la Rana>>, se encuentra situada en el barrio que le da nombre, al pie de la legendaria Alcazaba de Berja, entre el pozo de Pago y Benejí.
Reproduce el mismo esquema de <<Fuente Galeria>>, con su reja y azaquia, que da el nombre a otro brazal de riego. En su entorno aparecen lienzos de las murallas de la Alcazaba árabe (siglo IX al XIV), que demuestran el interés por defender el manantial.
Su uso es eminentemente agrícola, careciendo de cualquier rasgo suntuario. La tradición popular atribuye a sus aguas propiedades medicinales, siendo muy visitada por los virgitanos buscando estas cualidades.
Fuente de Alcaudique
Es la primera de Berja que se encuentra viniendo desde Almería. Da nombre a un populoso barrio: Alcaudique, topónimo latino conocido como << caput aquae>> ( cabeza de agua ), que tradujeron los árabes por <<Quibdique>> (aldea junto a la fuente), del deriva su nombre actual.
Documentada desde el siglo XVI, su aspecto corresponde a la política hidraúlica de los gobiernos monárquicos del siglo XIX.
Es una fuente de galería, con reja de forja, y una gran acequia, aunque a diferencia de otras fuentes similares, dispone de rasgos ornamentales genuinos: su entorno de piedra, con bancos alrededor para el descanso de la gente, y la galería que está decorada con dos pilastras, arco y una pequeña cornisa con clave.
La acequia de la fuente da nombre al Brazal de riego, creando un apéndice conocido como << El Prado>>, antiguo abrevadero de ganado, actual lavadero público y, al mismo tiempo, lugar de esparcimiento.
Fuente de Hirmes
Es una corta galería que recoge el agua de una sima o grieta rocosa acumulándola en una alberca. Allí una guíta con un nudo por propietario, quitar: divide el volumen de agua según la tierra. Al ser apenas una veintena, no hay acequiero y alguien vocea el cambio hasta completar la tanda de 15 a 20 días. Cada propietario distribuía el agua en lo más preciso pero no podía venderla.
Fuente de la Cañada de Roda
Esta fuente sigue el sistema de distribución de albercadas. El depósito era el centro de adjudicación y reparto del agua entre las explotaciones familiares de acuerdo con la superficie de sus tierras de regadío particulares y sus derechos. El agua se distribuía por volumen, el responsable de la distribución del agua, mediante una vara de madera en la que hay insertadas una serie de clavijas, medía la profundidad del agua. El número de señales era igual al número de familias que compartían el agua, siendo la distancia entre ellas el volumen de agua que correspondía a cada propietario. La vara se introducía y se ordenaba la salida de agua hasta la marca.
Fuentes de Marbella
Esta situadas en un tramo sin posibilidad alguna de cultivo. Tiene un caudal permanente de alrededor de 515 litros por segundo, con lo que se llegaba a abastecer la vega abderitana.
Aquí os dejo un enlace para más información:
http://www.berja.es/
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